Número 59http://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364652024-03-19T05:07:05Z2024-03-19T05:07:05ZLos "vaivenes" discursivos de <i>La Nación</i>Díaz, César LuisGiménez, Mario Jorgehttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364812019-12-26T04:03:03Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
El diario de los Mitre contribuyó en la construcción discursiva del golpe cívico militar proponiendo la figura del “gran cambio” para “recuperar el orden” social y económico como instancia previa a la “restauración del sistema democrático”.
Con ese fin se debía eliminar al “populismo” y a los “grupos armados” tal como lo postulaba la doctrina de seguridad nacional, imponiendo el terrorismo de Estado mediante los grupos de tareas y los centros clandestinos de detención, al tiempo que anulaba prácticamente las instancias participativas de la sociedad civil y censurando a los medios de comunicación.
No obstante, su rol siguió siendo significativo pues de algún modo terminaron por monopolizar la circulación de la opinión, circunstancia que algunos de ellos aprovecharon para tomar distancia del poder dictatorial.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZEl diario de los Mitre contribuyó en la construcción discursiva del golpe cívico militar proponiendo la figura del “gran cambio” para “recuperar el orden” social y económico como instancia previa a la “restauración del sistema democrático”.
Con ese fin se debía eliminar al “populismo” y a los “grupos armados” tal como lo postulaba la doctrina de seguridad nacional, imponiendo el terrorismo de Estado mediante los grupos de tareas y los centros clandestinos de detención, al tiempo que anulaba prácticamente las instancias participativas de la sociedad civil y censurando a los medios de comunicación.
No obstante, su rol siguió siendo significativo pues de algún modo terminaron por monopolizar la circulación de la opinión, circunstancia que algunos de ellos aprovecharon para tomar distancia del poder dictatorial.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>El diario <i>Convicción</i>: entre Massera y la MarinaBorrelli, Marcelo Hernánhttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364802019-12-26T04:03:01Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
El diario <i>Convicción</i> (1978-1983) nació vinculado a la Marina argentina y al proyecto político del almirante Emilio Eduardo Massera, jefe máximo del arma durante los dos primeros años del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional. Esta situación dio lugar a un emprendimiento periodístico original, que formaba parte de lo que podría denominarse “la prensa del Proceso”, a diferencia de los medios tradicionales, que deben ser abordados desde su propia historia, dando cuenta de su comportamiento “durante” el Proceso.
2008-04-01T00:00:00ZEl diario <i>Convicción</i> (1978-1983) nació vinculado a la Marina argentina y al proyecto político del almirante Emilio Eduardo Massera, jefe máximo del arma durante los dos primeros años del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional. Esta situación dio lugar a un emprendimiento periodístico original, que formaba parte de lo que podría denominarse “la prensa del Proceso”, a diferencia de los medios tradicionales, que deben ser abordados desde su propia historia, dando cuenta de su comportamiento “durante” el Proceso.Medios y disctadura: la mirada académicaBurkart, Mara Elisahttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364792019-12-26T04:03:12Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
El trabajo propone un análisis crítico de la literatura académica sobre los la prensa gráfica masiva bajo la última dictadura militar habida cuenta de que “no hay aproximación posible a un problema histórico fuera del discurso historiográfico que lo ha construido”.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZEl trabajo propone un análisis crítico de la literatura académica sobre los la prensa gráfica masiva bajo la última dictadura militar habida cuenta de que “no hay aproximación posible a un problema histórico fuera del discurso historiográfico que lo ha construido”.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>Historia, periodismo y expresiones de la nueva izquierda intelectualPonza, Pablohttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364782019-12-26T04:03:01Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
El período histórico que va de 1955 a 1973 estuvo marcado en la Argentina por un conflicto central:
la proscripción del partido peronista. Si bien durante esos dieciocho años el país atravesó por un profundo proceso de tecnificación y modernización cultural, paradójicamente, el golpe de Estado al gobierno constitucional de Juan Perón (1955) abrió una etapa caracterizada por la imposibilidad de canalizar las controversias político-sociales por vías democrático-institucionales.
Como era de esperar, la marginación del peronismo de toda opción legalizada de acceso al poder tuvo diversas consecuencias, no sólo porque condujo a los sectores duros de ese partido hacia canales informales e insurreccionales de reclamo, sino porque condicionó el desarrollo de toda práctica cultural. Asimismo, para los nuevos y sucesivos huéspedes de la Casa Rosada, garantizar la gobernabilidad requirió de una creciente represión contra quienes resistían la privatización de las decisiones políticas y la pérdida de beneficios sociales conseguidos durante las gestiones presidenciales de Perón.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZEl período histórico que va de 1955 a 1973 estuvo marcado en la Argentina por un conflicto central:
la proscripción del partido peronista. Si bien durante esos dieciocho años el país atravesó por un profundo proceso de tecnificación y modernización cultural, paradójicamente, el golpe de Estado al gobierno constitucional de Juan Perón (1955) abrió una etapa caracterizada por la imposibilidad de canalizar las controversias político-sociales por vías democrático-institucionales.
Como era de esperar, la marginación del peronismo de toda opción legalizada de acceso al poder tuvo diversas consecuencias, no sólo porque condujo a los sectores duros de ese partido hacia canales informales e insurreccionales de reclamo, sino porque condicionó el desarrollo de toda práctica cultural. Asimismo, para los nuevos y sucesivos huéspedes de la Casa Rosada, garantizar la gobernabilidad requirió de una creciente represión contra quienes resistían la privatización de las decisiones políticas y la pérdida de beneficios sociales conseguidos durante las gestiones presidenciales de Perón.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>Enderezar la prédicaOrtiz, María Juliahttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364772019-12-26T04:03:07Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
¿De qué manera se construye, se argumenta, un pensamiento democrático en un período histórico flanqueado por dos golpes de Estado, donde la articulación de los debates intelectuales estaba regida, en la teoría y en la práctica, por el término revolución? Este artículo, por sus límites, no podrá enseñarnos el paso a paso de tal proceso pero sí podrá brindarnos alguna pista.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00Z¿De qué manera se construye, se argumenta, un pensamiento democrático en un período histórico flanqueado por dos golpes de Estado, donde la articulación de los debates intelectuales estaba regida, en la teoría y en la práctica, por el término revolución? Este artículo, por sus límites, no podrá enseñarnos el paso a paso de tal proceso pero sí podrá brindarnos alguna pista.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>Del folletín a la historieta: del héroe individual al héroe colectivoSujatovich, Luis Maurohttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364752019-12-26T04:03:06Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
A contramano de la cultura oficial, condicionados por el formato y la calidad de las entregas, debiendo aprovecharse de un canal de ventas ajeno, Gutiérrez y Oesterheld han sabido aprovechar su talento para enriquecer a la cultura popular. Tal vez sabiendo que el folletín, “junto a la canción popular y la historieta argentina es acaso la forma marginal que mejor nos define en nuestras posibilidades de crear un medio de expresión propio, auténticamente creador” (Sasturain, 1995).
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZA contramano de la cultura oficial, condicionados por el formato y la calidad de las entregas, debiendo aprovecharse de un canal de ventas ajeno, Gutiérrez y Oesterheld han sabido aprovechar su talento para enriquecer a la cultura popular. Tal vez sabiendo que el folletín, “junto a la canción popular y la historieta argentina es acaso la forma marginal que mejor nos define en nuestras posibilidades de crear un medio de expresión propio, auténticamente creador” (Sasturain, 1995).
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i><i>La Vanguardia</i> frente al frustrado retorno de Perón en 1964Panella, Claudiohttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364742019-12-26T04:02:59Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
A mediados de la década del 60, La Vanguardia ya no era la que había sido en décadas anteriores. Expresión devaluada en argumentos, lectores e influencia en la sociedad, representaba el ala más liberal y derechista de los socialistas argentinos. Sin embargo, no había cambiado en nada su opinión respecto de Perón y el peronismo a través de un discurso que fue el impuesto a partir de 1955 por la Revolución Libertadora. En consecuencia, su rabiosa prosa antiperonista estaba cargada de mordacidad, parcialidad extrema y continuos razonamientos falaces. Pero por sobre todas las cosas, y esto es lo que más llama la atención -aunque a esta altura del relato no debería ocurrir-, defendió intereses que no eran los de una verdadera democracia participativa sino todo lo contrario. A su modo de ver, la democracia sería efectivamente tal si se excluía de la vida política del país al peronismo, es decir si se continuaba con la proscripción del mismo y se impedía el regreso de su líder. Curioso concepto de democracia esta donde minorías identificadas con verdaderas dictaduras militares se arrogaban el derecho de impedir la participación de las mayorías.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZA mediados de la década del 60, La Vanguardia ya no era la que había sido en décadas anteriores. Expresión devaluada en argumentos, lectores e influencia en la sociedad, representaba el ala más liberal y derechista de los socialistas argentinos. Sin embargo, no había cambiado en nada su opinión respecto de Perón y el peronismo a través de un discurso que fue el impuesto a partir de 1955 por la Revolución Libertadora. En consecuencia, su rabiosa prosa antiperonista estaba cargada de mordacidad, parcialidad extrema y continuos razonamientos falaces. Pero por sobre todas las cosas, y esto es lo que más llama la atención -aunque a esta altura del relato no debería ocurrir-, defendió intereses que no eran los de una verdadera democracia participativa sino todo lo contrario. A su modo de ver, la democracia sería efectivamente tal si se excluía de la vida política del país al peronismo, es decir si se continuaba con la proscripción del mismo y se impedía el regreso de su líder. Curioso concepto de democracia esta donde minorías identificadas con verdaderas dictaduras militares se arrogaban el derecho de impedir la participación de las mayorías.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>Una propuesta para anclar el discurso informativo en la historiaCebrelli, AlejandraArancibia, Víctorhttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364732019-12-26T04:02:57Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
Uno de los problemas con los que se enfrenta el analista del discurso periodístico es la tendencia del mismo a instituir como uno de sus valores más preciados la novedad. Esto lleva, generalmente, a obliterar la historicidad de los hechos considerados noticiables y dificulta, tanto a los lectores como a los consumidores críticos o no, la percepción del funcionamiento de la memoria colectiva en los procesos de producción, circulación, consumo y reproducción de la información. De esta forma se produce un efecto de sentido de fugacidad y de <i>ahistoricidad</i> que tienden a considerarse como una de las características propias de este discurso.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZUno de los problemas con los que se enfrenta el analista del discurso periodístico es la tendencia del mismo a instituir como uno de sus valores más preciados la novedad. Esto lleva, generalmente, a obliterar la historicidad de los hechos considerados noticiables y dificulta, tanto a los lectores como a los consumidores críticos o no, la percepción del funcionamiento de la memoria colectiva en los procesos de producción, circulación, consumo y reproducción de la información. De esta forma se produce un efecto de sentido de fugacidad y de <i>ahistoricidad</i> que tienden a considerarse como una de las características propias de este discurso.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>Una historia para contarOrtiz Marín, Ángel Manuelhttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364722019-12-26T04:03:11Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
Los inicios del periodismo bajacaliforniano aparecen registrados en el siglo XIX con la publicación del periódico <i>El Fronterizo</i> editado en marzo de 1873 por Eliseo Schieroni en Real del Castillo (Lelevier, 1943). A principios del siglo XX, en Mexicali, el primer periódico fue <i>El Noticioso</i>, editado por Gustavo Becerra en 1915 y en Tijuana, <i>La Voz de Tijuana</i>, en 1925 por Alberto Bernal como director (Lelevier, 1943: 24).
Estos periódicos en realidad eran semanarios con escasa circulación, dados los problemas de las comunicaciones y la poca población lectora de esos tiempos. Es considerado <i>El Heraldo de Baja California</i>, fundado el 16 de julio de 1941 en Tijuana por Rubén Darío Luna, como el primer y más antiguo diario de Baja California (Diccionario Enciclopédico de Baja California, 1989).
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZLos inicios del periodismo bajacaliforniano aparecen registrados en el siglo XIX con la publicación del periódico <i>El Fronterizo</i> editado en marzo de 1873 por Eliseo Schieroni en Real del Castillo (Lelevier, 1943). A principios del siglo XX, en Mexicali, el primer periódico fue <i>El Noticioso</i>, editado por Gustavo Becerra en 1915 y en Tijuana, <i>La Voz de Tijuana</i>, en 1925 por Alberto Bernal como director (Lelevier, 1943: 24).
Estos periódicos en realidad eran semanarios con escasa circulación, dados los problemas de las comunicaciones y la poca población lectora de esos tiempos. Es considerado <i>El Heraldo de Baja California</i>, fundado el 16 de julio de 1941 en Tijuana por Rubén Darío Luna, como el primer y más antiguo diario de Baja California (Diccionario Enciclopédico de Baja California, 1989).
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>La radio clandestina en América Latina: notas para su estudioZaragoza Fernández, Luishttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364712019-12-26T04:03:05Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
La existencia de emisoras de radio clandestinas en América Latina no pertenece a un pasado remoto y ya superado, sino que, por el contrario, es una realidad que tiene aún plena vigencia.
Hace apenas unas semanas, la Ministra de Comunicaciones de Colombia denunció que las FARC controlan emisoras clandestinas que transmiten desde equipos móviles situados en las zonas fronterizas del país con Venezuela, Ecuador, Brasil y Perú. Y cada sábado, Radio Insurgente, “La voz de los sin voz, voz del Ejército Zapatista de Liberación Nacional”, transmite por onda corta, “desde algún lugar de las montañas del sureste mexicano”, un programa de una hora aproximada de duración dirigido “a la sociedad civil nacional e internacional”.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZLa existencia de emisoras de radio clandestinas en América Latina no pertenece a un pasado remoto y ya superado, sino que, por el contrario, es una realidad que tiene aún plena vigencia.
Hace apenas unas semanas, la Ministra de Comunicaciones de Colombia denunció que las FARC controlan emisoras clandestinas que transmiten desde equipos móviles situados en las zonas fronterizas del país con Venezuela, Ecuador, Brasil y Perú. Y cada sábado, Radio Insurgente, “La voz de los sin voz, voz del Ejército Zapatista de Liberación Nacional”, transmite por onda corta, “desde algún lugar de las montañas del sureste mexicano”, un programa de una hora aproximada de duración dirigido “a la sociedad civil nacional e internacional”.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>La prensa oriental entre 1814 y 1829González Demuro, Wilsonhttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364702019-12-26T04:03:10Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
Dentro del conjunto de herramientas que posibilitan estudiar los temas relacionados con la opinión y los espacios públicos, los medios de prensa ocupan un lugar preferencial en tanto fuente y objeto de análisis. Este artículo acerca algunas informaciones y reflexiones sobre la prensa oriental de comienzos del siglo XIX y las posibilidades de trabajo que brindan los casi 40 títulos aparecidos entre el fin de la dominación hispánica y el nacimiento del Estado Oriental.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZDentro del conjunto de herramientas que posibilitan estudiar los temas relacionados con la opinión y los espacios públicos, los medios de prensa ocupan un lugar preferencial en tanto fuente y objeto de análisis. Este artículo acerca algunas informaciones y reflexiones sobre la prensa oriental de comienzos del siglo XIX y las posibilidades de trabajo que brindan los casi 40 títulos aparecidos entre el fin de la dominación hispánica y el nacimiento del Estado Oriental.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>Apuntes sobre el periodismo afroporteñoGeler, Leahttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364692019-12-26T04:02:55Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
En este trabajo nos proponemos analizar la prensa afroporteña entre 1873 y 1882 como un conjunto (parte integrante de la prensa de carácter popular que se desarrolló a lo largo del siglo XIX en la ciudad), un fenómeno con una dinámica particular dentro del proceso histórico de consolidación del estado nacional. Para ello estudiaremos los periódicos afroporteños La Broma, La Perla y El Unionista. Como ha señalado Chamosa, en ese momento los periódicos afrodescendientes circulaban por un ámbito localizado y relativamente pequeño, discurriendo paralelamente la mayor parte del tiempo a la esfera pública por la que circulaban los periódicos nacionales o locales (que incluía a los afroporteños entre sus lectores) pertenecientes a los grupos hegemónicos, y a periódicos de otros grupos subalternos. Conformaban lo que hemos denominado en otra parte –siguiendo a Nancy Fraser- “contra esfera pública subalterna” afroporteña.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZEn este trabajo nos proponemos analizar la prensa afroporteña entre 1873 y 1882 como un conjunto (parte integrante de la prensa de carácter popular que se desarrolló a lo largo del siglo XIX en la ciudad), un fenómeno con una dinámica particular dentro del proceso histórico de consolidación del estado nacional. Para ello estudiaremos los periódicos afroporteños La Broma, La Perla y El Unionista. Como ha señalado Chamosa, en ese momento los periódicos afrodescendientes circulaban por un ámbito localizado y relativamente pequeño, discurriendo paralelamente la mayor parte del tiempo a la esfera pública por la que circulaban los periódicos nacionales o locales (que incluía a los afroporteños entre sus lectores) pertenecientes a los grupos hegemónicos, y a periódicos de otros grupos subalternos. Conformaban lo que hemos denominado en otra parte –siguiendo a Nancy Fraser- “contra esfera pública subalterna” afroporteña.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>La voz de la mujer en el periodismo argentino del siglo XIXBocco, Andrea Alejandrahttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364682019-12-26T04:03:09Z2008-04-01T00:00:00ZArticulo
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
En el siglo XIX los periódicos cultos y populares, con diferentes estrategias, configuran la voz de la mujer, desde la simulación de la escritura femenina y despliegan una pedagogía para ese público lector. Las gacetas femeninas debaten sobre la legitimidad de estas representaciones y buscan un espacio para el despliegue de la voz propia.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>
2008-04-01T00:00:00ZEn el siglo XIX los periódicos cultos y populares, con diferentes estrategias, configuran la voz de la mujer, desde la simulación de la escritura femenina y despliegan una pedagogía para ese público lector. Las gacetas femeninas debaten sobre la legitimidad de estas representaciones y buscan un espacio para el despliegue de la voz propia.
<i>(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)</i>EditorialTram[p]as de la Comunicación y la Culturahttp://sedici.unlp.edu.ar:80/handle/10915/364672019-12-26T04:03:08Z2008-04-01T00:00:00ZContribucion a revista
Tram[p]as de la Comunicación y la Cultura; no. 59
Presentación de los contenidos de la revista.
2008-04-01T00:00:00ZPresentación de los contenidos de la revista.