In Spanish
El acuerdo firmado por el gobierno argentino con el FMI en 2018 propuso una serie de condicionalidades que buscaban garantizar la sostenibilidad de la deuda. En la actualidad, el nuevo gobierno que asumió en diciembre de 2019 se encuentra negociando un nuevo acuerdo que buscará restablecer esa sostenibilidad sobre la base de nuevas condicionalidades. Aquel acuerdo planteó explícitamente algunas protecciones a los sectores más vulnerables de la población. De alguna forma velada, el Fondo Monetario Internacional (FMI) reconoció en un acuerdo la necesidad de garantizar la protección de la población más vulnerable como contracara necesaria para la sostenibilidad de la deuda. ¿Garantizan esas salvaguardas los derechos humanos frente a las consecuencias del ajuste fiscal en pos de la sustentabilidad de la deuda? En este artículo mostraremos que para obtener una respuesta a tal interrogante es necesario incorporar al debate la dimensión de la reproducción social y la sostenibilidad de la vida como punto de pivote entre la protección de los derechos humanos y la sustentabilidad de la deuda. Analizaremos de qué manera al pensar el problema de la deuda desde la sostenibilidad de la vida, los derechos humanos se presentan como la manifestación formal de las demandas concretas de la población para garantizar sus condiciones de reproducción material. Serán esas demandas las que en la práctica establecerán los límites políticos al ajuste en pos de la sustentabilidad de la deuda. A partir de esa discusión, analizaremos por qué el programa de ajuste firmado en 2018 en el marco del acuerdo con el FMI no solo violentó abiertamente los derechos económicos y sociales de la población en Argentina, sino que al poner en riesgo la sostenibilidad de la vida (y así la propia reproducción ampliada del capital), puso en cuestión la propia sustentabilidad fiscal de la deuda. Tendiendo puentes entre dos paradigmas diferentes pero complementarios (el paradigma de los derechos humanos y el paradigma de la reproducción social), mostramos que si no se pone en el centro la vida y los derechos humanos, la deuda es siempre insustentable.
In English
The agreement signed by the Argentine government with the IMF in 2018 proposed a series of conditionalities that sought to guarantee debt sustainability. Currently, the new government that took office in December 2019 is negotiating a new agreement that will seek to reestablish that sustainability on the basis of new conditionalities. That agreement explicitly raised some protections for the most vulnerable sectors of the population. In a somewhat veiled way, the International Monetary Fund (IMF) recognized in an agreement the need to guarantee the protection of the most vulnerable population as a necessary counterpart to debt sustainability. Do these safeguards guarantee human rights in the face of the consequences of fiscal adjustment in pursuit of debt sustainability? In this article we will show that in order to answer this question it is necessary to incorporate into the debate the dimension of social reproduction and sustainability of life as a pivot point between the protection of human rights and debt sustainability. We will analyze how, when thinking about the debt problem from the perspective of life sustainability, human rights are presented as the formal manifestation of the concrete demands of the population to guarantee their conditions of material reproduction. In practice, it will be these demands that will establish the political limits to the adjustment in pursuit of debt sustainability.