Como consecuencia de problematizar la construcción de la bolivianidad en La Plata y Gran La Plata, enmarcada en un contexto socio-histórico particular, como es el que atraviesa Bolivia a partir de la gestión gubernamental de un primer mandatario aymara, nos hemos aproximado a posibles respuestas para entender el proceso que hemos denominado “nueva nacionalización”. Dicho concepto señala la interpelación que el Estado de origen realiza a sus ciudadanos residentes en el exterior, para de este modo intentar ubicarse como referente de identificación.
Las explicaciones que se desprenden de nuestra investigación, surgen a partir de comprender a la migración como un fenómeno social y abarcativo, capaz de modificar o reafirmar las prácticas y experiencias de las personas; como así también la forma en que éstas se identifican con respecto a sus connacionales, a los integrantes de la sociedad receptora y a ellas mismas. Esto se va a expresar en emergentes categorías de identificaciones que de alguna manera se hallaban en desuso y que, al activarlas mediante las codificaciones sociales de los migrantes, desarrollarán disputas y acuerdos acerca de los sentidos que ponen en circulación.