Una fórmula elocuente se repite a lo largo de esta entrevista: “¿por qué no poner espacios de infancia en todas las plazas en todos los lugares donde haya pibes?”, “¿por qué no hacer una colección Pilar que acompañara también a las niñeces?”, en fin: “¿por qué no?”. Resuelta a desafiar los destinos adversos, quizá como respuesta vital a aquella injusticia inexplicable y, como dice, “aleatoria” –la pérdida de su pequeña hija Pilar a principios de 2011–, Paula Kriscautsky ha hecho de esa potente pregunta el motor de la Biblioteca Del otro lado del árbol. La biblioteca, situada en el Parque Saavedra, frente al Hospital de Niños de La Plata, nació como homenaje a Pilar y como homenaje a las infancias –nos cuenta su fundadora–, y ha hecho de la defensa de la imaginación y de los sueños, entre los diversos derechos de las niñeces promovidos, su más fuerte pilar.