La Odontología es una profesión que no está exenta de los riesgos para la salud que su ejercicio acarrea. Desde la declaración de la OMS en el año 1946 definiendo el “estado de salud”, se ha aceptado la inclusión en este concepto de ejercer el trabajo, producir y desarrollarse profesionalmente. Objetivo: La presente exposición se propone hacer hincapié en reforzar y concientizar las actividades que el profesional debe realizar para prevenir estas enfermedades profesionales. Material y Método: La metodología es explicativa narrativa basada en bibliografía científica orientada a la prevención de enfermedades laborales y la legislación respectiva. Resultado: La expresión enfermedad profesional se refiere a las alteraciones o lesiones corporales que puede sufrir el profesional como consecuencia del desempeño de su profesión y en el ámbito de su trabajo, en el desarrollo de la Odontología los desórdenes músculo-esqueléticos y los niveles de vibraciones y ruido a las que estamos expuestos, sumado a los contaminantes que habitualmente manipulamos y el estrés que el desempeño acarrea constituyen la generalidad de las afecciones profesionales. Conclusiones: La prevención, los buenos hábitos y la ergonomía, constituyen los aliados fundamentales para evitar incapacidades laborales temporarias y permanentes, también se aconseja la visita periódica al psicólogo para controlar los niveles de estrés a los que el personal de la Salud está expuesto.