La paleoparasitología es una de esas disciplinas que fascinan desde el mismo momento en que uno escucha de qué se trata. ¿Cómo es posible estudiar parásitos de hace cientos o incluso miles de años? ¿Qué nos pueden decir sobre la vida, la salud y los movimientos de poblaciones humanas y animales del pasado? ¿Cuál fue la relación entre los parásitos y sus hospedadores tiempo atrás? Esta rama de la parasitología, que combina elementos de la arqueología, la antropología, la paleontología y la biología, intenta contestar estas preguntas, rastreando y analizando los parásitos presentes en sitios arqueológicos o paleontológicos, a partir de materiales conservados como coprolitos, sedimentos pélvicos y momias.