A inicios del año 1971, un hecho de singular importancia y real trascendencia, sin antecedentes históricos, despertó el interés de todos los argentinos al tiempo que centró la geográfica mirada de país hacia las islas Malvinas. Hacia allí se dirigieron, desde la ciudad de Tandil, los aviones Grummann Albatros de la Fuerza Aérea Argentina. Se concretó de esta manera el primer enlace oficial argentino con los pobladores de las islas. Estos vuelos iniciaron una comunicación con Malvinas que tenían como finalidad la asistencia humanitaria, el acercamiento hacia los isleños, ganarse la confianza de los mismos y lograr, a mediano o largo plazo, una solución negociada al problema de la soberanía. Al mismo tiempo, y como con secuencia de ello, se firmaron los Acuerdos de Comunicaciones a partir de los cuales nuestro país se encargaría del abastecimiento de las islas, que Gran Bretaña se resistía a realizar. Durante once años, LADE realizó vuelos regulares a Malvinas en los anfibios “Albatros” y en los Fokker F-27 y F-28. El primer vuelo de la Fuerza Aérea Argentina realizado para unir la parte continental de la República Argentina con su parte insular, las Islas Malvinas, se efectuó el 15 de febrero de 1971, desde Tandil, por requerimiento de la Embajada de Gran Bretaña en Buenos Aires. El presente trabajo tiene por finalidad recordar lo que aquellos vuelos significaron, el papel que jugó la ciudad bonaerense de Tandil en los mismos, la importancia de los Acuerdos de 1971, y analizar los objetivos que nuestro país perseguía al establecer estas comunicaciones.