En la presente comunicación se señala que la orientación –desarrollada tanto por los profesores y tutores, como por el orientador- así como la utilización de las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (NTIC) se convierten en dos factores clave para mejorar los procesos de enseñanza-aprendizaje y la calidad educativa (Sanz, 2001).
Algunas de las pistas de trabajo ofrecidas están relacionadas con el desarrollo de proyectos pedagógicos y de innovación donde se impliquen no sólo equipos de profesores de una única área, sino a nivel interdisciplinar, y un paso más adelante, donde se involucren miembros del resto de subsistemas de la comunidad educativa: familias, alumnado, personal de administración y servicios y otros recursos de la zona.
En España particularmente se debe avanzar en la dinamización del trabajo en equipo y en la formación inicial y continua del profesorado. La falta de motivación, la desinformación, la sobrecarga de roles y funciones (Álvarez y Rodríguez Espinar, 2000), la rutina y la falta de colaboración son algunas de las actitudes negativas que puede frenar la utilización óptima de los recursos tecnológicos en la educación.