Este trabajo se propone indagar en las causas de la finalización de las vanguardias plásticas en nuestro país hacia finales de los años ´60, tomando como ejes los problemas de la politización del arte y la relación problemática entre vanguardias e instituciones. Los vanguardistas, en un principio despolitizados, fueron comprometiendo primero la temática de su producción, y luego sus acciones, e incluso sus carreras. El foco principal de las vanguardias plásticas argentinas se fue corriendo de lo estético a lo político, hasta poner el arte al servicio de la política. En la segunda sección, se analizará la relación entre los vanguardistas y las instituciones. Ese vínculo, en principio cooperativo, se fue problematizando a medida que las circunstancias sociales y políticas se volvían más adversas a un arte que se tornaba, a su vez, cada vez más radicalizado y trasgresor. Esto desembocó en una relación abiertamente conflictiva, influyendo negativamente sobre la vitalidad y continuidad del movimiento vanguardista. Por último, se plantearán algunas conclusiones acerca de la influencia que ambas cuestiones ejercieron sobre la finalización de las vanguardias plásticas de los años ´60 en nuestro país, porqué terminaron cuando lo hicieron, y cómo influyó en estos procesos el contexto, nacional e internacional.