Los procesos de intercambio de calor constituyen un área de vital importancia en la formación de los ingenieros químicos. Las nuevas tecnologías y dispositivos por su visibilidad y aplicabilidad, permiten optimizar el grado de interactividad y el nivel de retención de la información en el proceso enseñanza-aprendizaje. Por lo tanto, al reconocer el valor de los procesos de transferencia de calor dentro de la ingeniería química, surge la necesidad de mejorar las prácticas docentes para así proveer al estudiante de un instrumento que minimice el manejo de variables y la complejidad de los cálculos, que en muchos casos no permiten adquirir una visión global y eficaz del proceso. Para realizar la experiencia y demostrar los contenidos teóricos con una base práctica, se utilizó un intercambiador de calor de placas planas paralelas con diversos caudales de fluido.