En términos generales, la preocupación fundamental sobre la que se sustentó la práctica refiere a los procesos de desgranamiento de la matrícula universitaria durante el tramo inicial de las carreras y al problema del sostenimiento de las trayectorias estudiantiles en el sistema universitario. Ambos problemas son hoy de suma relevancia para aquellas instituciones y actores institucionales que buscan aportar a la democratización social de la Educación Superior, en un tiempo en donde la matrícula se ha masificado y se ha modificado el perfil de estudiantes que ingresan a las universidades.