El problema de la enseñanza del derecho se vincula a la organización de las universidades y a las exigencias de la sociedad en cuanto al tiempo para graduarse, número de profesores, y de profesionales. La función de la Universidad se cumple a través del cuerpo docente. La cátedra debe estar reservada a quienes demuestren aptitud y vocación por el estudio y el mantenimiento de la categoría docente debe ser puesto a prueba a lo largo del desempeño en los distintos grados que deba haber en la carrera profesional. Así como la instrucción puede adquirirse mediante el esfuerzo solitario de un autodidacta, la enseñanza supone la intervención de un maestro y un discípulo, el aprendizaje cooperativo puede adquirirse como cambio conceptual (profesor, alumno, clima, aula).