Suiza tiene poco más de 8 millones de habitantes y no suele aparecer a diario en la prensa internacional. Sin embargo, el 9 de febrero de 2014 se produjo un acontecimiento que, a pesar de solamente afectar directamente a los países europeos, fue noticia en todo el mundo: El pueblo suizo se expresó a favor de la iniciativa popular “Contra la inmigración masiva”.
Este resultado ha desencadenado desde entonces, a nivel nacional, toda una serie de debates en parte muy emocionales y polémicos sobre el “por qué” del resultado y sobre las consecuencias del mismo. Y es que la política migratoria, que es una temática delicada en si, también afecta fuertemente las relaciones de Suiza con la Unión Europea.
A pesar de que Suiza se encuentre situada en medio de Europa y esté rodeada por tres de los seis países fundadores de la UE, nunca entró en dicha organización. Pero la realidad geográfica (y las realidades políticas, económicas y socioculturales) no deja ninguna duda sobre la relevancia que la UE tiene para Suiza. Por otro lado, las reacciones en la UE ante el resultado de la iniciativa suiza del 9 de febrero demuestran la importancia que también la UE le otorga a un país que, a pesar de estar fuera de la Unión, ofrece un importante valor añadido.
Sin embargo la cobertura mediática sobre el resultado de la iniciativa del 9 de febrero no se limitó a Europa. Llamó la atención la trascendencia que tuvo la noticia en otras partes del mundo. Este hecho insinúa que el acontecimiento implica cuestiones globalmente importantes.
El presente documento tiene por objetivo explicar porque se realizó la iniciativa popular del 9 de febrero y porque fue aceptada, analizar las posibles consecuencias de la misma y encontrar razones por la repercusión mediática que tuvo en el extranjero.
A través de este análisis, este trabajo examinará la hipótesis que postula que fue el impacto del resultado de la iniciativa sobre las relaciones bilaterales entre Suiza y la Unión Europea lo que suscitó el interés fuera de Suiza.