Cuando inició el derrotero de Armiliar en 2017, la revista señaló diversas fascinaciones históricas a través de disputas historiográficas: las nociones que atraviesan los paisajes y los territorios del arte, los conceptos que definieron una nueva forma de pensar la literatura artística, los libros sobre y de arte, los modos de las imágenes impresas actúan en ellos, los fundamentos de la historia del arte argentina, con su visión europeizante y su variante indigenista, y tantas otras derivas históricas. Lejos de agotarse, esas variantes se ramificaron año a año y número a número con trabajos de colegas que con entusiasmo y método transformaron episodios del pasado artístico del país y del mundo en verdaderos centros de irradiación hacia pesquisas inadvertidas. En ese sentido, el presente número discute el problema de las formas de la literatura artística, de su lectura y análisis en la contemporaneidad.