Si bien puede considerarse a la gestión de José María Ramos Mejía al frente del Consejo Nocional de Educación (1908-1913) como el momento en que el nacionalismo tiende a tornarse ideología oficial del aparato educativo, en obvia y estrecha vinculación con el avance de estas ideas en el seno de la sociedad argentina de los albores del Centenario, parece pertinente sostener que la preocupación por lo nacional haya encontrado su momento fundacional hacia la década del ochenta, cuando dentro del sistema escolar comiencen a esbozarse una serie de conductas y valores que alcanzarán su desarrollo definitivo en las primeras décadas de nuestro siglo.
Las líneas que siguen pretenden estudiar uno de los aspectos en que este incipiente nacionalismo se manifestó: la inquietud por la existencia de libros de texto argentinos en la escuela primaria.
Aunque las conclusiones de nuestro trabajo puedan hacerse extensivas a los libros escolares un general, centraremos nuestra atención especialmente en los libros de lectura.