En los últimos tiempos se ha observado un creciente número de ataques a centros vacacionales alrededor del mundo. Para el presente escrito tomaremos como caso de estudio los ataques terroristas a centros turísticos en países árabes, se observara de inmediato que dichos ataques de ninguna manera decidirán de modo directo ni indirecto el resultado final de la lucha armada entre el “grupo terrorista o célula armada” y el/los estado/s en cuestión, sino que muy por el contrario busca a través de dicho ataque generar una crisis en el sector económico turístico del país en cuestión (en muchos casos dicho sector económico es de vital importancia) como por ejemplo en Egipto en ataques en El Cairo, Sharm el Sheij o Hurgada y otros centros turísticos del mismo país; o Bali el 12 de octubre de 2002 en el distrito turístico de Kuta, Indonesia (en dicho ataque terrorista, 202 personas asesinadas, además de 209 heridos); o en los ataques en Túnez al Museo del Bardo en Marzo de 2015 y el ataque en Susa (Túnez) el 26 de junio de 2015, cabe aclarar que se trata del único país donde la primavera árabe de 2011 terminó con décadas de dictadura (en dicho ataque 37 personas murieron y 36 resultaron heridas). Y es ahí donde entra el segundo factor bajo análisis, los medios de comunicación, dado que de ese modo se llega al gran público, el espectador hacia quien está dirigido el acto.