El modelo de crecimiento urbano, desarrollado desde el inicio del siglo XXI en la Región Capital que conforman los partidos de La Plata, Berisso y Ensenada, es diferente al vigente hasta ese momento, que se configuraba como mancha de aceite, es decir como extensión de la urbanización, en forma de derrame sobre entornos productivos y espacios abiertos periurbanos, condicionada por barreras naturales y redes de infraestructuras. Más aún, es diferente respecto de la propuesta fundacional implementada desde 1882, cuyo modelo territorial contemplaba relaciones a escala urbana y regional a partir de un eje principal configurado entre: el puerto, con un sistema de canales hacia el río; la ciudad, estrictamente contenida por un anillo de circunvalación y rodeada por una zona de chacras y quintas destinadas al aprovisionamiento; y el territorio interior pampeano. (Mun. La Plata, 1995)