La serie está constituida por 8 obras creadas en conjunto con distintas personas. Cada una de las personas participantes realizó manchas de colores sobre un lienzo, con la única consigna de que no debían hacer una imagen figurativa. Esto llevó al juego y al divertirse en el proceso de la obra. Tras esta instancia, realice mi intervención con tintas negras y blancas (para diferenciarse de las manchas de los colaboradores) y encontré formas figurativas en las manchas, y las lleve a un primer plano. Las obras se basan en la falta de control sobre los elementos, y la creación desde la imperfección y la aleatoriedad, sin embargo, el trabajo también terminó lidiando con la idea de arte como Juego y arte como fiesta que explora Gadamer, de una forma más cercana de la esperada en un inicio. El resultado final es una obra que es más que su resultado, su proceso mismo esta cargado de un nuevo sentido y experiencia sensorial.