La Radioterapia utiliza radiaciones ionizantes para el tratamiento de enfermedades, principalmente en oncología. Comenzó a principios del Siglo XX y desde entonces no deja de evolucionar.
Es así que los criterios respecto de qué es aceptable y qué no también cambian continuamente y cada vez más rápido.
De la misma manera que en los capítulos anteriores, esta vez también nos ocuparemos del diseño de las instalaciones, la protección radiológica ocupacional, del público y del paciente y, fundamentalmente, del análisis de las situaciones anormales y los diferentes enfoques para su tratamiento.
Comenzaremos con un resumen de los objetivos de la radioterapia, para luego exponer los aspectos relacionados con la protección radiológica.