Las prácticas de lectura y escritura son el eje de la pedagogía socio-comunitaria porque permiten plantear nuevas formas de enfrentar los procesos educativos partiendo de las necesidades del contexto y fortaleciendo las habilidades mediante la interacción social. El objetivo principal de este proyecto fue identificar los elementos más significativos para la comprensión de las características particulares que asumen la lectura y la escritura como experiencias de vida y prácticas culturales en los espacios y desarrollo de los grupos socio-comunitarios. Se trabajó con la metodología cuali-cuantitativa a través de la investigación-acción con la técnica descriptiva y la observación directa en un trabajo etnográfico e interpretativo desde la perspectiva de los participantes en los grupos “Senderitos de amor”, “Hogar de la madre y el niño” y Fundación PACES. En el procedimiento se aplicó la intervención mediante la triangulación de -atención comunitaria- señalada por Merriam y Tisdell (2015) valorando las percepciones, acciones y sentidos para la reconstrucción simbólica. Se acompañaron de prácticas mediadoras con estudiantes universitarios quienes aportaron en la construcción de esta propuesta con la intervención pedagógica mediante experiencias comunitarias; esto permitió valorar las prácticas socioculturales con diversas miradas y realidades, dejando información significativa en esta investigación. En el G1: los adultos mayores carecen de hábitos lectores y las practicas comunitarios aplicadas en la intervención fortalecieron su estilo de vida. En el G2: las madres solteras demostraron poca habilidad lingüística, pero la motivación por parte del grupo de investigación permitió que las competencias mejoraran sobre todo en la parte de escritura. En el G3, al ser un grupo netamente vulnerable, se visibilizó realidades diversas, pero el interés por las prácticas lectoescritoras les hacía cambiar la parte emocional y actitudinal, proyectándose un mejor bienestar personal y social. Se concluye que la dimensión socio-comunitaria influye inevitablemente en la inserción educativa y la participación social, respetando la diversidad en las practicas lectoescritoras.