Enseñar arquitectura tiene implícito al menos dos condiciones fundamentales que movilizan cualquier acción, la primera es la formación de futuros arquitectos que trabajen sobre las condiciones del mundo contemporáneo y la segunda es contribuir al progreso de la disciplina a través de la creación de nuevas posibilidades de operación.
La publicación de un catálogo de la producción de un taller de proyectos es un acto que se dirige en las direcciones antes mencionadas, buscando posicionar una marca dentro del mar de la disciplina, amplio, múltiple, heterogéneo y profundo. En un taller de proyectos, continuamente se produce información que desaparece rápidamente sin posibilidad de una pausa que nos permita una reflexión mas allá de la resolución del instante en que se está produciendo el propio ejercicio.
Registrar y publicar gran parte de este material nos permite poner en discusión lo realizado, criticar con otra distancia, compartir con otros que no participaron de ese momento proyectual, profundizar la crítica y poder avanzar hacia otros campos, obligando a no repetir la ya dicho sino construir nuevas reflexiones sobre las ya realizadas, avanzar, progresar, de alguna forma evolucionar.