El siguiente trabajo intenta reconocer las operatorias objetuales con las que el dispositivo escénico se configura, reconfigura y desconfigura. En el marco del estudio de la utilización de objetos en la danza, nos interesa aquí enfocarnos en el uso de objetos que generan modificaciones en el espacio escénico. ¿Cómo opera el objeto sobre el espacio?, ¿Cómo el dispositivo escénico es transformado por esta operatoria objetual? Vamos a analizar aquí el uso de objetos como caballos de Troya. Un medio para introducir al espectador al espacio escénico o para meter al intérprete en el del espectador. Un medio para colisionar el dispositivo. ¿Cómo estos objetos se modifican para tal empresa? Para todos estos interrogantes vamos a analizar obras que utilizan los objetos de esta manera, que llamaremos dinámica, y vamos a poner el foco en cuáles son las operatorias objetuales que realizan para llevarlo a cabo las obras seleccionadas como parte del corpus, “Todxs tenemos un pelo” de Lucía Giannoni y “La vida misma es un encantador artificio” de Candela Mosquera, serán utilizadas para llevar adelante este análisis que llamamos: una aproximación a la proxémica con objetos. La proxémica, disciplina que estudia el uso del espacio en la comunicación, será evocada para estudiar las consecuencias del objeto dinámico en el espacio de las obras de danza. Con todo, intentaremos alcanzar conclusiones acerca de, como mencionamos, cuáles son las operatorias objetuales con las que interviene el dispositivo, cuáles son las consecuencias en el objeto de tales incidencias y, finalmente, como la participación del público, mediado por los objetos, opera en tales consecuencias.