Los ojos del cerdo guardan similitudes con el ojo humano y han sido utilizados como un método interactivo para la enseñanza del ojo humano para estudiantes en especialidades de oftalmología.
Tienen una vasculatura retiniana holangiótica, sin tapetum, con fotorreceptores cónicos en la parte más externa de la retina, lo que los hace valiosos para la investigación comparativa.
Los cerdos utilizan el sentido de la vista como complementario al sentido del olfato, el cual tienen muy desarrollado, y al sentido de la audición. El globo ocular varía en sus dimensiones debido a la variación de tamaños entre las distintas razas.