Los “clásicos” y la Educación Sexual Integral: aportes para una conciliación posible

Abstract

Desde la sanción, en octubre de 2006, de la ley 26.150 en todo el territorio de la República Argentina que establece “el derecho de todos los educandos a recibir Educación Sexual Integral en todos los niveles del sistema educativo”, lxs docentes de todas las áreas del conocimiento nos hemos visto interpeladxs a reconfigurar nuestros abordajes didácticos específicos. En el área de Literatura, esta demanda del sistema educativo se encuentra, en parte, facilitada por la producción literaria más reciente, en la que la problemática de género, las múltiples orientaciones sexuales y las constituciones familiares no heteronormativas, entre otras temáticas, constituyen una fuente invaluable que permite explorar en “mundos posibles” que cuestionan, problematizan e interpelan las sexualidades y los cuerpos. Existe una tendencia a pensar que para abordar cuestiones referidas a la ESI en literatura, se deben leer textos actuales, en los que es evidente - y en algunos casos, inevitable - el tratamiento de temas referidos a la sexualidad. Así, los autores y las obras legitimados históricamente desde la tradición académica y escolar fueron gradualmente reemplazados por otras voces más próximas en el tiempo, supuestamente más cercanas a los gustos del alumno (Duarte, 2011, p. 92). ¿Qué sucede entonces con los textos denominados “clásicos” que fueron históricamente portadores de nuestro acervo cultural? ¿Es posible un abordaje de estos desde una perspectiva que incluya la dimensión sexo-genérica?