El atentado perpetrado en Londres el último 22 de marzo, que tuvo como protagonista nuevamente a un lobo solitario, vuelve a poner en un primer plano de la agenda europea de seguridad al terrorismo internacional como la principal amenaza transnacional al poder del Estado. La Jerarquización de la agenda de seguridad internacional luego del 11-S no es un fenómeno nuevo en las relaciones internacionales, pero si ha tomado nuevas dimensiones luego de los atentados terroristas que azotaron, y azotan, a la Unión Europea en los últimos años, reposicionando al terrorismo internacional como prioridad frente a otras amenazas transnacionales como el crimen organizado.