La vasta obra de Armonía Somers ha reunido numerosas lecturas. Si algo añade la del presente trabajo es su enfoque que dista de ser literario. Con esto quiero subrayar que la filosofía de género es el punto de partida de este intento de interpretar algunos aspectos del riquísimo libro La mujer desnuda. Incorporo, en consecuencia, elementos interpretativos procedentes de campos ajenos a las letras y, sin intención de agotar la obra, pretendo dar cuenta de algunos marcados simbolismos, no siempre suficientemente contemplados por los comentadores que he tenido la oportunidad de recorrer. Así, he tomado algunos temas tópicos como la maternidad, la sexualidad, sus complejos y desconcertantes metáforas y el feminismo de Armonía Somers a los efectos de mostrar la riqueza y a la vez la paradójica ruptura erótica del texto con los cánones sociales de la época y su marcado -si se me permite- puritanismo.