El CAMP ha sido definido por los críticos norteamericanos como “a theatrical overgestual representation”, como “a gender questioning”, como “a particular gay sensibility of the 20th. Century”, como “a postmodern denaturalization of gender categories” o, más ampliamente, como una manera de hacer visibles “gender categories”; en la misma dirección las definiciones más específicas insisten en que se trata de “a manifestation of the queer discourse in the impossibility of impersonation with the compulsory heterosexual pressure, but under the enuntiative ties of the dominant order”; que a un nivel deconstructivo pasará a ser “a destabilization of the relation between things”. En todo caso, es evidente que la estética “camp” implica una fuerte ironía autorial, por donde se manifiesta con mayor fuerza el lugar desde donde se emite la enunciación.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)