La palabra justa reúne textos ya editados e inéditos; cuando se ensamblan estos textos el riesgo que se corre es el de la heterogeneidad, y el desafío para el autor es precisamente cómo dar homogeneidad al conjunto. El libro sortea con lucidez este obstáculo, como si los trabajos ya editados hubieran sido pensados en función del futuro libro, y se ensamblaran con el resto a través de links cuidadosamente elaborados. Sin embargo, la homogeneidad no está dada por ese ensamble, ni tampoco, me animaría a decir, por los temas genéricos y la cronología aproximada que el subtítulo menciona, sino por el trabajo crítico, y con este concepto me refiero en especial a dos aspectos: el objeto y la escritura, dos aspectos que en el caso de Dalmaroni podrían rescribirse como dos pasiones o tal vez como dos obsesiones.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)