El Palacio de Cristal, levantado en Londres para la Gran Exposición de 1851, integró uno de los capítulos más conocidos de la historia de la arquitectura y los diseños.
Sin embargo, prácticamente desconocida es la historia del Palacio de Cristal, luego de su traslado al parque de Sydenham, al sudeste de Londres. Relocalizado tres años después, parte del enorme espacio –casi toda el ala norte, de unos 10.000 m2– fue ocupado por una serie de recreaciones de arquitecturas del pasado. Dos grandes patios dedicados al arte grecolatino y medieval estaban acompañados de varios courts: egipcio, griego, romano, bizantino, medieval y renacentista. Uno más celebraba la arquitectura de Asiria en Nínive; y otro, el Islam español, mediante una reproducción del Patio de los Leones de la Alhambra. El edificio y su interior continuaron en pie hasta que un pavoroso incendio destruyó las instalaciones en 1936.