Desde el comienzo del período democrático, a partir de considerar la educación como factor fundamental de la democracia así como inversión a largo plazo sumamente redituable, se puso en marcha un proceso de cambio educativo. Esto culminó en la Ley Federal de Educación, uno de cuyos pilares es la capacitación docente, no librada como en otras ocasiones a la iniciativa particular de personas o instituciones sino con indicaciones precisas desde lo estatal. En este contexto aparecen una serie de materiales destinados directa o indirectamente a provocar dicho cambio. Conscientes de la importancia que este proceso reviste nos proponemos investigar, por un lado, los materiales en circulación, a partir de los cuales se produce la construcción de sentido de la transformación educativa, como así también los procesos de recepción por parte de los docentes, destinatarios inmediatos de la mencionada capacitación.