La reforma educativa y la formación de ciudadanos democráticos

Abstract

La sanción de la Ley Federal de Educación en 1993, significó –al menos en una interpretación bondadosa- un intento de reformar en profundidad la enseñanza en los primeros niveles. Durante más de un siglo la educación argentina no había sufrido modificaciones significativas y, con el restablecimiento de la democracia, los cuestionamientos referidos a esta esfera no eran menores. En la renovación - en la que tomaron parte importantes intelectuales como consultores - uno de los objetivos considerados explícitamente por el discurso oficial como más importante era que la escuela impulsara la formación de ciudadanos democráticos. En relación a este propósito la Historia y la Filosofía debían desempeñar en ella un papel relevante y, para cumplir con ese propósito, era necesario reformar los planes de estudio. Este objetivo se propuso ser mucho más que una mera declamación. Por este motivo, además de aparecer explicitado en las nuevas “expectativas de logro” de cada uno de los nuevos niveles de la Educación General Básica, ese propósito impulsó una serie de cambios en la enseñanza escolar de ambas disciplinas.