La vieja concepción de los jardines botánicos y zoológicos como una mera exhibición de especies, ha mutado en los últimos años bajo la forma de bioparques en medio de un debate donde las plantas y animales son integrados a un modo de concebir las colecciones biológicas, los recintos y el paisaje, conformando un relato que los conecta y los involucra en programas de conservación y de educación ambiental.