El Laboratorio de Ictiofisiología fue fundado en 1960 por un convenio entre la Dirección de Conservación de la Fauna (DCF) y la Facultad de Ciencias Naturales y Museo (FCNyM), a la que se agregaron luego otras instituciones. Correspondió el mérito primero a dos personalidades -el Prof. Dr. Sebastián Guarrera, decano de la Facultad de Ciencias Naturales y el Sr. Juan Carlos Montemerlo, director de la DCF-, animadas por una visión precisa de la necesidad de desarrollar la investigación científica, dedicarle todos los recursos de que podían disponer y apoyar a jóvenes egresados que se iniciaban en la investigación científica.