Los siglos XVIII y XIX supusieron cambios profundos en la sociedad inglesa. La literatura como discurso social intervino activamente en las disputas culturales que tuvieron lugar modificando sus modos de decir y representar. El libro explora, desde ópticas variables, los procesos que posibilitaron el surgimiento del Romanticismo, y los modos cómo el cambio en las condiciones de lectura, edición y divulgación determinaron cambios profundos de esa literatura.