En los últimos años han surgido algunos conceptos novedosos sobre el abordaje intersectorial relacionado con la incidencia o prevalencia de las enfermedades infecciosas emergentes y reemergentes (EIEyR) causadas por diferentes agentes etiológicos ya sean estos bacterianos, parasitarios, micóticos, priónicos o virales pudiendo ser transmitidos al hombre de manera directa o indirecta a través de animales o personas infectadas, por vectores o alimentos, incluyendo al agua. El cambio climático y factores antropogénicos inciden sustancialmente en el resurgimiento de estas enfermedades. El agente infeccioso emergente ingresa en una nueva población o en distinto espacio geográfico afectando a una población huésped; las enfermedades reemergentes refieren al resurgimiento de entidades aparentemente erradicadas o con su incidencia disminuida. Estos procesos han ocurrido desde siempre y su incremento en las últimas décadas muestra vínculo estrecho con el cambio climático y los factores antrópicos ligados a la coyuntura socioeconómica donde la pérdida de recursos o una regeneración de los mismos resultan relevantes.