En español
Conectar conceptualmente el complejo proceso de individualización que se desarrolla desde hace más de dos milenios en la cultura occidental y cuya importancia tiende a ser identificada cada vez más, desde diversas corrientes de las ciencias sociales, con la noción de ‘usuario’ que comienza a utilizarse en los estudios y discursos sobre las Nuevas Tecnologías Info-comunicacionales, equivaldría a reproducir en una metáfora teórica la ideología representacional y la ideología técnica que, desde la publicidad, la mercadotecnia o la tecnófila exaltación de la tradición por lo nuevo (tradición que no deja de ser modernista: Rosenberg, H., 1968 y Calinescu, M., 1991) es asumida por discursividades sobre las formas tecnológicas que reducen la complejidad de los fenómenos sociales. Tanto porque frente a los medios tradicionales el sujeto social no fue ni es un sujeto pasivo, como porque los cambios que introduce la “fenomenología” de la convergencia mediática y su integración multimedial en los procesos de digitalización de textos, imágenes, sonidos, palabras y en la mediatización representacional del espacio público y de los sujetos sociales, no son absolutamente novedosos: esos cambios ya habían comenzado en los medios tradicionales y sus prácticas, representaciones y hábitos continúan bajo las nuevas configuraciones en el entorno informático. Consideramos que es la tradición modernista de la exaltación por la novedad, la que concluye en su traición bajo la promesa tecnológica y el supuesto de su omnipresencia.
En inglés
Conceptually connecting the complex process of individualization that has been taking place for over two millennia of Western culture and its importance tends to be increasingly identified from within various streams of social science, with the notion of ‘user’, which came into use with the studies and speeches on New Info-communications Technology. This notion reproduced a theoretical metaphor ideology and ideology representational technique which, from advertising, marketing or technophile exaltation of the new tradition (a tradition that doesn't fail to be modernist: Rosenberg, H., 1968 y Calinescu, M., 1991) and is assumed by discourses on technological forms that reduce the complexity of social phenomena. Both because the mainstream media against the social subject was and is not a ‘tabula rasa’, and because the changes introduced by the “phenomenology” of media convergence and integration of multimedia in the process of digitalization of text, images, sounds, words, and representational media coverage in the public space and social subjects are not quite new: these changes had already begun in the traditional media and its practices, representations and habits continue under the new settings in the computing environment. We believe it is the modernist tradition of the exaltation of novelty, which ends in its betrayal of the promise of technology and the course of its omnipresence.