El presente artículo discute la construcción de cuatro arquetipos divinos en relación a la diosa del amor y la guerra, Inanna, los cuales se cristalizan en el devenir socio-histórico mesopotámico entre finales del cuarto y mediados del segundo milenio a.C. En particular, se estudia cómo el Descenso de Inanna al Inframundo, un texto de época paleo-babilónica, recoge cuatro relatos sobre la divinidad (diosa benevolente, diosa muerta, diosa vengadora y diosa de luto), los cuales se articulan de manera intertextual en dicha gran narración, obedeciendo a una triple necesidad política, litúrgica y didáctica de fines del tercer milenio a.C.