En español
Este artículo estudia la identificación de los homosexuales varones como un grupo singular durante la primera década peronista, bajo la figura de los "amorales". A diferencia de principios de siglo XX, donde estaban integrados en el caótico ambiente de la mala vida. Los varones de mediados de siglo que tenían relaciones sexuales con varones comenzaron a ser destacados como una desviación peligrosa del ideal familiarista y heterosexista. Este proceso se explica a través de la masculinización de la clase obrera operada por el peronismo y la aparición contemporánea de los jóvenes como un sector social problemático y peligroso. Se estudia este desarrollo de la intolerancia comenzando en los primeros años 40 hasta llegar a las razzias antihomosexuales de 1954-1955 en las calles, bares y plazas de Buenos Aires. A diferencia de otras interpretaciones que subrayan el carácter ancilar de las batidas policiales, sostenemos que fueron más que una excusa en el combate del peronismo contra el catolicismo, pues se inscribían en tensiones más profundas del orden social, sexual y simbólico de la Argentina de posguerra.
En inglés
This paper studies the emergence of a male homosexual identity as "amorales" during the Peronist era. At the beginning of the twentieth century, queer men where part of a general environment of vice and crime and their identity was not formed as an independent one. On the contrary, towards the 1950s, homosexuals became a dangerous deviation in contrast with the ideal of family and normal heterosexuality that was reinforced at the time. This process implied the increasing masculinization of the working class that took place under Peronism and the contemporary emergence of youth as a threatening social group. We study the development of an increasing intolerance that began in the early 1940s and ended up towards 1954 with a widespread police persecution of homosexuals in the streets, bars and parks of Buenos Aires. In contrast with other scholars who identified this persecution with a tension between Peronism and Catholicism, we argue that the repressive attitude of the state towards homosexuals was imbedded in a deeper structural conflict within the socio-sexual symbolic order of postwar Argentina.