El libro de Obregón aborda un tema profundamente complicado y al mismo tiempo decisivo para comprender el desarrollo de la historia argentina de la segunda parte del siglo XX y hasta nuestros días. La observación del autor de que encontró poca bibliografía previa y de que los acontecimientos estudiados están todavía muy cercanos (p. 11) no le quita a la investigación su valor historiográfico por la disciplina del método que está en su base y, porque, en última instancia, si nunca se escribe una historia definitiva de nada, la historia hay que empezar a escribirla con la memoria todavía fresca. Tiempo habrá para revisores, y los revisores deberán agradecer precedentes como éste.