En este significante que propone Lacan en el Seminario 10 cuando de manera sucinta, breve y reveladora comenta el texto de Freud Lo Ominoso, en esta palabra “inhabitante” (Lacan, 2006: 87), encontramos dos dimensiones o magnitudes que nos interesan para orientarnos en algunos aspectos, que hemos podido despejar, de lo que se pone en juego en la clínica del aislamiento generalizado y su sostenida angustia, a la que nos vemos confrontados, en la actual pandemia, causada por el contagio del nuevo virus: COVID-19.
Decimos que encontramos allí dos dimensiones o magnitudes, porque en este significante se entrecruzan las magnitudes, del tiempo (ya que el significante inhabitante Lacan lo opone a inhabitual, y lo habitual es una operación que es resultado del “conocimiento” de lo que alguna vez fue nuevo) y el espacio (siendo esta la dimensión que toma más peso ya que hace referencia al “hábitat”), en sus relaciones con la repetición, lo consabido, y lo desconocido, lo sorprendente.