El traslado de enseñar a leer, desde un marco general del lenguaje, a enseñar a leer en el horizonte de la lectura literaria de obras literarias narrativas, genera el interés por proponer y analizar estrategias y modelos para mejorar la comprensión lectora de obras literarias de los futuros docentes de lengua, y se convierte en algo de vital importancia, pues lo que de tales procesos se derive se convertirá en práctica docente al futuro.
Así, el problema por resolver en esta investigación se centra en los posibles vacíos existentes en las propuestas para mejorar la comprensión lectora de obras literarias narrativas desde un modelo de lectura literaria que produzca un encuentro entre el mundo del texto y el mundo del lector. Tal problema se puede evidenciar en la construcción de un Estado del Arte sobre la comprensión lectora de obras literarias, con más precisión de obras literarias narrativas. Llegar a este planteamiento problémico requiere la delimitación de un escenario de indagación que tiene como actores principales a estudiantes de Licenciatura en áreas afines a la Lengua Castellana, Lingüística y Literatura. A continuación, hay que ubicar este escenario en el contexto más amplio de la Educación Superior y, de manera precisa, en los procesos de formación lectora de licenciados.
La importancia de definir y poner en la práctica educativa la comprensión lectora de obras literarias narrativas radica en que las obras literarias tienen un poder formativo que se enmarca en la formación humanística de licenciados en programas afines a Lengua Castellana, Lingüística o Literatura. Existe, además, un componente de radical importancia en este proyecto sobre la comprensión lectora de obras literarias narrativas: la percepción misma de la literatura en la formación deja de ser un asunto centrado en la comprensión lectora como una cuestión metacognitiva y funcional a la formación disciplinar por
competencias, para convertirse en una manera de percepción de la realidad a partir del encuentro entre la realidad ficcional de la obra literaria y la realidad que se produce en la experiencia literaria del lector.
En el progreso de esta indagación surge el asunto de la lectura literaria, que a su vez se encuentra relacionada con los siguientes aspectos: pedagogía de la literatura y educación literaria, enseñanza de la literatura y competencia literaria narrativa. La distinción de estos aspectos está orientada, en primer lugar, a la descripción textual de fuentes documentales y literarias, para luego continuar con las tendencias de la lectura literaria en Colombia. En este rastreo se evidencian las posibilidades, alcances y limitaciones de lo que se denomina Didáctica de la literatura y su tránsito a una pedagogía de la literatura. Al final se ponen en consideración los temas recurrentes asociados a la lectura literaria en Colombia.