J. G. Frazer divide la historia de la Humanidad en tres etapas: primero la Edad sin fuego; segundo la Edad del fuego utilizado como calor y para cocción; y tercero la Edad del fuego-luz, es decir, como medio de iluminación. En efecto, todas las leyendas más arcaicas, suponen que el hombre tuvo que aprender el dominio del fuego y obtenerlo de los dioses. El origen del fuego para el hombre ha sido siempre un misterio, un fenómeno empapado de carácter sagrado.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)