La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de los Estados Unidos (NASA), se encuentra desarrollando el proyecto Artemisa, que consiste en el retorno a nuestro satélite natural, más de medio siglo después que las misiones Apolo completaran la primera serie de exploraciones tripulada en la luna. Este nuevo proyecto, compromete a la agencia espacial norteamericana y a un conjunto de países asociados, en establecer un programa de exploración lunar extendida, a partir de 2024, hasta el 2030, el cual incluirá el desarrollo de infraestructura permanente que incluirá bases, vehículos de exploración, sistemas de actividad extravehicular y especialmente, instrumentos de prospección para localizar y extraer agua del cráter Shackleton en el polo sur lunar.
Asimismo, varias empresas privadas, entre las que se encuentran SpaceX y Blue Origin, están revolucionando los sistemas de transporte espacial, con el desarrollo de vehículos reutilizables, que han reducido drásticamente los costos de la puesta en órbita de cargas útiles espaciales, lo cual da sustento a los planes de la NASA para un desarrollo continuado del espacio más allá de la órbita baja terrestre, y con el objetivo posterior de la exploración tripulada del planeta Marte.