El acceso masivo a diversos dispositivos técnicos presenta la necesidad de replantear los programas de algunas asignaturas relacionadas con el diseño de imágenes audiovisuales. Los estudiantes ingresantes a las carreras de Artes Audiovisuales ya son productores de imágenes en distintos formatos antes de iniciar sus estudios académicos. Cuando las cátedras se muestran indiferentes a este hecho y proponen, a través de su currículum oculto, desactivar los conocimientos previos, terminan desestimando los intereses de los estudiantes. Es factible, sin embargo, abordar la enseñanza de la disciplina desde sus dimensiones poéticas y compositivas, para que la aprehensión de los conocimientos técnicos más avanzados pueda volverse una necesidad por parte del estudiante en lugar de una imposición de los docentes. El presente artículo describe y analiza la experiencia y los resultados del primer año de la cursada de Iluminación y Cámara, materia del primer año de todas las carreras del Departamento de Artes Audiovisuales de la Facultad de Artes, de la Universidad Nacional de La Plata, en donde se reestructuró el programa, en base a lo descrito anteriormente.