La temperatura y la humedad relativa pueden incidir en la conservación de los materiales orgánicos, como el papel, los libros y demás materiales que se encuentran en depósitos de bibliotecas. La vigilancia y el control de estas variables se recomienda para alertar sobre valores perjudiciales, pero también puede utilizarse para organizar las colecciones según su fragilidad en función de las zonas más adecuadas para su conservación. En este trabajo se presenta una evaluación de temperatura y humedad relativa realizada en un depósito de la Biblioteca de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina, con el objetivo de verificar el entorno climático de la colección y zonificar los sectores más apropiados según la disposición de la sala en el edificio que la contiene. Se realiza una campaña de monitorización anual en cinco sectores del depósito naturalmente ventilado contrastando con datos de referencia exterior provistos por la estación meteorológica del Observatorio UNLP. Los resultados muestran que las condiciones climáticas son satisfactorias, y el estudio proporciona la delimitación de un rango de admisibilidad acorde a las oscilaciones climáticas acontecidas, y una evaluación numérica de cada punto monitorizado. Las estanterías colocadas en el centro de la sala y sobre la cara noeste muestran mejor desempeño respecto de aquellas ubicadas hacia el cerramiento sudoeste del edificio.