En trabajos anteriores (Paccapeto et al., 1987; Gofcerg et al., 1988) con cultivares y líneas avanzadas de trigo (Tricticuma estivum L.) a densidades de siembra normales (250 granos m-2) se observó una gran uniformidad en el rendimiento y sus componentes, ésta podría estar relacionada con falta de variabilidad genética. La homogeneidad genética de los cultivos (Duvick, 1984) es un hecho que preocupa a los especialistas debido a que aumenta la vulnerabilidad a plagas y enfermedades (Power y Kareiva, 1990) y disminuye la capacidad de adaptación al estrés ambiental.