En la actualidad Triunfo es objeto de estudio en distintas universidades españolas y extranjeras; la tarea, ya iniciada, de realizar una investigación rigurosa de las múltiples redes del semanario con la realidad cultural, política y social de su tiempo se muestra hoy como ardua y necesaria. El cuestionario que sigue quiere ser una breve muestra de la profunda huella que Triunfo dejó en el entramado cultural de su época, así como del vasto campo de estudio abierto a los especialistas. La paciencia y la generosa disposición de las consideradas figuras cardinales de Triunfo, su director José Ángel Ezcurra y los escritores Eduardo Haro Tecglen y Manuel Vázquez Montalbán han hecho posible la nota que hoy publica Olivar. La tecnología hizo el resto, permitiendo conciliar las charlas en la antigua sede del Conde del Valle de Suchil 20 con el cable de fibra óptica, los encuentros en Barcelona con el intercambio satelital e, incluso, permitiendo en algún caso, confiar todo el peso de la comunicación a la vía digital. Las distintas conversaciones se convirtieron finalmente en un cuestionario repartido en dos series de preguntas, la primera común, la segunda diferenciada según la distinta trayectoria de los entrevistados.