Durante los periodos de tiempo en que las piezas metálicas tienen que ser transportadas y almacenadas, las superficies expuestas pueden verse afectadas por la humedad ambiental y por la contaminación atmosférica. Por este motivo, se las protege con las denominadas imprimaciones temporarias. El término temporal no radica en la eficacia protectora sino en el hecho de que pueda ser fácilmente removida posteriormente para el montaje o el trabajo de las superficies a las que se aplican.