Este trabajo recoge experiencias extensionistas en el primer ciclo de una escuela secundaria – primero y segundo año – con poblaciones “vulnerabilizadas” (Terigi, 2014) , entre estudiantes, docentes, orientadores, directivos y profesionales en formación y formadores en Psicología Educacional.
La apuesta fue ambiciosa: colaborar en el desarrollo de interacciones vitales significativas (Vygotsky, 1924) , la construcción de lazo, la reconfiguración del semejante, el sostenimiento de la ley que habilita a todos a ser parte.
El recorrido hizo visible la necesidad urgente y el carácter estratégico del fortalecimiento de tramas de trabajo colaborativo entre actores educativos y psicoeducativos como condición de fundación del sujeto ético.