La crisis sanitaria causada por el nuevo virus Covid-19 ha traído fuertes repercusiones globales, desde la emergencia médica hasta las diferencias en la economía de distintos sectores de la población.
Este acontecimiento histórico sin duda marcara la historia del mundo, pues la aparición de la enfermedad nos ha puesto a reflexionar y a analizar distintos fenómenos comunicacionales como el caso de las noticias falseadas o fake news. Ante esta alarma, México fue el primer país en practicar la técnica de detección de la enfermedad, inclusive las naciones de Centroamérica se reunieron en el país para formar a sus especialistas y así identificar los brotes en sus territorios, como también entrelazar las competencias necesarias. (Aristegui Noticias, 2020). En esta coyuntura, se considera idealmente que la población que tiene la información suficiente actuará de acuerdo al contexto y realizará las prácticas adecuadas para cuidarse de situaciones que lo pongan en riesgo. Sin embargo, durante estos acontecimientos se vivió una ola de pánico que hacía frente a estas medidas proveniente de falsas declaraciones. En México se inició con el registro del primer caso del virus SARS-CoV-2 el 28 de febrero, posterior a ello, el país entro en las diferentes fases de contingencia para minimizar la propagación y aminorar la curva epidémica, esto no fue posible porque en México circularon diversas noticias falseadas que desinformaban a la población con el fin de cumplir manipular a la opinión pública.